AVANCES EN LA GESTIÓN DE SISTEMAS SANITARIOS
Reseña de la obra
Tradicionalmente, la práctica clínica se inicia con la valoración y diagnóstico del paciente, continúa con el plan terapéutico y dura mientras se mantiene la relación médico-paciente. En este proceso el profesional moviliza los recursos necesarios para conseguir las mejoras posibles en la situación de salud de los pacientes. La gestión clínica actúa como un lenguaje común, como un estímulo, entre los clínicos, las autoridades sanitarias y los pacientes. La gestión clínica se define como el uso de los recursos, intelectuales, humanos, tecnológicos y organizativos, para el mejor cuidado de los enfermos y están en relación con el conocimiento clínico, la mejora de los procesos asistenciales y la organización de las unidades clínicas. Es decir, practicar gestión clínica es integrar la mejor práctica clínica y el mejor uso de los recursos disponibles. La gestión clínica se acompaña de una descentralización de la organización. El objetivo es que los profesionales tengan capacidad para organizarse y diseñar estrategias para la mejora de los resultados de la atención a los pacientes. Puede implicar una transferencia de riesgos a las unidades clínicas con la posibilidad de ganar o perder en función de los resultados.
En gestión clínica se delimitan tres niveles: 1. Gestión de la asistencia sanitaria individual, es decir, la elección de un determinado tratamiento o de una indicación quirúrgica. Es sin duda el aspecto más relevante puesto que ésta se basa en la eficacia de esta primera decisión profesional. La MBE, la epidemiología clínica y las técnicas de evaluación clínica aportan información para la selección de la pauta más adecuada al enfermo. 2. Gestión de los procesos asistenciales que tiene que ver con la efectividad clínica y con la mejora en la gestión de los procesos tanto asistenciales como administrativos. Lo esencial es garantizar la atención integral al paciente. El análisis y la mejora continuada de los procesos asistenciales es una herramienta esencial. 3. Gestión de la unidad o de la utilización de los recursos como son los presupuestos clínicos, sistemas de control de gestión, medida de la actividad de los servicios asistenciales, sistemas de información de costes, etc., Pero ello exige determinados compromisos de los profesionales de salud y gestores de la misma como son los de aprender a dirigir y a ser dirigidos, contribuir a las decisiones de gestión y de organización y en la mejora de las instituciones, y desarrollar habilidades y áreas de conocimiento hasta ahora alejadas de la formación académica y profesional tradicional. Las profesiones sanitarias, como ha sucedido en innumerables ocasiones a lo largo de siglos, están de nuevo ante la necesidad de afrontar un cambio adaptativo en este tercer milenio. O quizá el momento exija transformaciones de algunos aspectos que afectan a la naturaleza misma de aquellas. Sea como sea esta nueva edición viene a aportar luz en todo ello.
Autores
Rafael Ceballos Atienza. Doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad de Granada. Máster en Gestión y Dirección de Residencias de la Tercera Edad. Diploma de Puericultura para Médicos. Experto en Salud Infantil. Médico en el Servicio Andaluz de Salud e INSALUD. Investigador-docente en la Unidad de Hipertensión y Lípidos, Hospital Clínico San Cecilio, Granada. Coordinador y Técnico Asistencial, Distrito Sanitario Jaén Sur, Servicio Andaluz de Salud. Varios Estudios de Investigación Internacional y Nacional. Tres Premios Científicos. Ha publicado numerosos libros y participado en capítulos, artículos, guías, etc. e intervenido en numerosos congresos nacionales e internacionales. Gerente de Formación Alcalá.